¿Están reñidas la ética con la política?


No puedo por menos que sorprenderme por la actuación de determinados políticos, de diferentes niveles y partidos, que se alejan mucho de actuaciones éticas y dan la sensación de no servir a los ciudadanos de este país y aprovechar el cargo en su propio beneficio o de su partido.

En Cataluña se nombra conseller a uno de los firmantes de la carta en la que se reclamaba el pago de un porcentaje del sueldo a los cargos políticos nombrados por su partido. Dicho de otra manera, si querían seguir trabajando debían de pagar al partido. Y este servidor público, el sr. Vendrell, está siendo investigado por la fiscalía por si su actuación es constitutiva de delito.

Una diputada del congreso español, cuarta secretaria de la mesa, se lleva a su novio a Perú y lo hace pasar como observador dentro de la delegación de parlamentarios. ( se comenta que la actuación de este señor no fue muy correcta en determinados momentos)

En Marbella se nombra como responsable de Hacienda al abogado de uno de los acusados de corrupción.

¿Acaso la ética es sólo una palabra para los políticos? ¿Los señores fiscales miran hacia otro lado? ¿Habrá que construir plataformas de ciudadanos para que nos defienda ante los repetidos abusos de los políticos? ¿Terminaremos desencantados con los partidos y dejaremos de ir a votar en masa en las futuras elecciones?

La corrupción es un problema muy serio que empieza a ser alarmante en nuestro país y exige soluciones urgentes ya. Mañana puede ser tarde.
¿Qué pensáis vosotros?

1 amigos opinan:

Anónimo dijo...

Aquí lo que urge es una plataforma que exija la representación parlamentaria de la abstención y de los votos en blanco.
Si la abstención es del 50%, esa legislatura el parlamento tendría 175 diputados. Y si de los votos emitidos un 10% fueran en blanco, 17 diputados no tendrían derecho a votar en la cámara.
Sólo con esa sencilla regla, los políticos no es que se convirtieran en honrados, pero por lo menos se cuidarían muy mucho de no parecerlo.
Un saludo,
P.Gil