A vueltas con la clonación

El anuncio de surcoreano Woo-Suk de la clonación de un perro, Snuppy, ha vuelto a poner de actualidad los interrogantes éticos sobre la interferencia en la vida misma por parte e los científicos. Para la clonación usó una célula adulta de la piel de otro perro.

A pesar de su afirmación : Rechazo firmemente el termino de clonación humana”, el temor a que se esté intentando la clonación de seres humanos es enorme en los medios científicos, políticos y religiosos. Consideran que estos experimentos llevan a la ciencia a un terreno muy resbaladizo.

Por otro lado la investigación sobre células madre, que son capaces de convertirse en diferentes tejidos del cuerpo humano puede ser muy útil para la curación de numerosas enfermedades.

Ahora bien ¿pueden los científicos seguir adelante en sus experimentos con total libertad? O por el contrario ¿deben ponérseles normas claras acerca de los caminos que no deben de recorrer?

¿Qué pensáis vosotr@s?

3 amigos opinan:

Anónimo dijo...

Siendo una completa ignorante sobre estos temas, pienso que snupi es un cachorro precioso ¿no creen?. Si ya se clonan ovejas y perros, supongo que técnicamente no hay problemas para clonar humanos. Me extraña mucho que, revisando la historia de la ciencia hasta ahora, se vayan a dejar guiar por "razones éticas". No me sorprendería que ya hubiera unos cuantos clones humanos por ahí...

Me debato entre pensar las utilidades de la fabricación de tejidos y las aberraciones varias que se les pueden llegar a ocurrir... En fin, estamos a punto de ver muchas cosas...

De todas formas, para que se lo gasten en viajes a marte, mejor en esto que parece tener más utilidades...
MARIABENMEN

Anónimo dijo...

Hace algunos días, charlaba con una Doctora amiga, sobre el tema, que preocupa a muchos.
Su opinión negativa hacia la clonación humana tenía como fundamento la muerte del clon de la oveja, primer caso conocido. Decía, que la copia, al resultar de células de un animal adulto, había, posiblemente, apresurado la vejez del animal y en consecuencia su muerte.
No soy ducha en el tema, aunque he leído bastante.Pero prefiero que la discusión científica la lleven a cabo los especialistas.
La cuestión ética nos atañe, por el contrario a todos.
Mi opinión incluye dudas y sentimientos a granel.
Tengo miedo de que de llegue a prohibir el adelanto más importante hasta hoy, en el campo de la biología genética. Dicen que esta práctica terminaría definitivamente con determinados padecimientos de la humanidad, que los transplantes pasarían a la historia, y otros ricos hayazgos.
Tengo miedo, porque me retrotraigo en el tiempo, y no puedo dejar de pensar en el viejo oscurantismo propiciado por el clero y la soberbia científica de aquella época.
Tengo miedo que el horror de la inquisición pudiera instalarse nuevamente.
Me lleno de interrogantes, posiblemente por la incapacidad de comprender la ciencia y la falta de comprensión hacia el futuro.
El hombre y sus adelantos extraordinarios en todos las órdenes, me causa una reverente admiración.
Son los fines manipulados por otros hombres con igual talento, pero separados de todo compromiso con la humanidad, los que me atemorizan.
Recuerdo la historia narrada en "Los niños de Brasil" , "Mente Brillante", por no nombrar más... inmediatamente razono que la realidad supera a la ficción o que la ficción muchas veces adelantó el porvenir.
Un porvenir que nos aturde con sus cambios vertiginosos asimilados a medias o nunca.
La búsqueda del hombre por la perfectibilidad, más de cien veces causaron daños irreversibles al universo y a la humanidad.
El caso es, encontrar las fronteras.Dónde están?
La escencia humana es el Bien y el Mal.
El debate será infinito o hasta donde el Mal decida cuándo parar.
Mientras, nosotros, gente común, por lo menos, nos permitimos discurrir estos temas.
cadila

Anónimo dijo...

Clonación.
La clonación de humanos con seguridad es un hecho; sólo que aún no se ha mediatizado abiertamente. Cuando nos enfrentamos a temas "sensibles" tal como este, normalmente la gente analiza las cosas bajo el criterio del "peor es tal cosa..." y sobre sus argumentos, sofismas por lo general, cristalizan situaciones que hasta ese momento eran exclusivas del mundo virtual. La ciencia avanza inexorable en todos los campos, incluso, avanza sobre sí misma, modificando los paradigmas a mayor velocidad de lo que tarda su publicación. Humildemente creo, y ya lo anoté en mi blog, somos los últimos especímenes de una "serie" que comenzó con la popularización del Homo Sapiens, pasó por tantas civilizaciones y llegó hasta aquí, hasta hoy. Siento que llevamos la etiquita "Modelo Discontinuado" y andamos por la vida totalmente desinteresados al cierre de la línea de montaje que nos ha venido reproduciendo desde hace equis generaciones. Yo, personalmente, no adhiero a ninguna de las corrientes folosóficaso religiosas del fin del mundo. Sólo siento, y lo disfruto como tal, que soy uno de los últimos, una de las últimas horneadas del Ser humano concebido por un par biológico sexuado y parido de hembra; además de criado por aquello que socialmente se ha dado en llamar Familia. Confieso que cada tanto acaricio esos vocablos como quien acaricia el objeto que ha de entrar al museo a lucirse en estático silencio como documento del pasado. No siento nostalgia. A diferencia de los dinosaurios, somos una especie con conciencia de su destino y por lo tanto, me considero un ejemplar distinguido por tal circunstancia. A vivir... que se acaba el mundo (que conocemos).
Niccanor